CARACAS.- Crece la presión, tanto dentro como fuera de Venezuela, para que el Consejo Nacional Electoral (CNE) publique las actas de los comicios presidenciales del pasado 28 de julio, cuya victoria el ente electoral gubernamental concedió al actual mandatario, Nicolás Maduro, con un 51,95% de los votos frente el 43,18% de Edmundo González.

Tras el anuncio del CNE, la presión en las calles de los antichavistas ha sido constante, con protestas multitudinarias que se han saldado con varios muertos.

El pasado domingo, la jornada electoral transcurrió sin incidentes graves, pero una vez que cerraron los colegios, ante el retraso de los resultados y el llamamiento de la oposición a defender el voto, la gente empezó a congregarse a las puertas de los centros de votación. En plena madrugada, el presidente del CNE, Elvis Amoroso, anunció la victoria de Maduro y es entonces cuando llegaron las primeras denuncias de fraude electoral.

Mientras el presidente celebraba con sus simpatizantes la reelección a las puertas del Palacio de Miraflores, la oposición pidió a la población que permaneciera en las calles del país. El lunes 29 de julio fue una jornada de movilizaciones en toda Venezuela y también se produjeron las primeras detenciones. Maduro se presentó ante el Consejo Nacional Electoral, que le proclamó vencedor y también presentó un amparo ante el Tribunal Supremo. Además, el Fiscal General dictó orden de detención contra los opositores María Corina Machado y Edmundo González.

Estados Unidos se ha unido a las denuncias de fraude. Por su parte, la Organización de los Estados Americanos (OEA), que se reunió el pasado miércoles con carácter de urgencia en su sede en Washington, no ha conseguido sacar adelante una resolución de condena.

Las protestas llenan las calles de Caracas y otras ciudades de Venezuela en rechazo al resultado electoral de Maduro
Las protestas llenan las calles de Caracas y otras ciudades de Venezuela en rechazo al resultado electoral de Maduro
Este sábado, los venezolanos volvieron a manifestarse al grito de «Libertad» y en la marcha de Caracas estuvo Corina Machado, que fue recibida por miles de manifestantes, tras haber declarado que teme por su vida. Las protestas se sucedieron en las principales ciudades del país como Anaco, Cagua, Maracay, Valencia, Cumaná, Barinas o Maracaibo.

Las marchas antichavistas se desarrollaron un día después de que la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) solicitara al Consejo Nacional Electoral las actas oficiales de escrutinio con el resultado de las elecciones, como parte de una investigación para «certificar» los datos de los comicios. El TSJ le dio al CNE un plazo de tres días.

Maduro: «Esta vez no va a haber perdón»

Estas protestas se saldaron con 2.000 detenidos, tal como anunció el presidente, Nicolás Maduro: «Tenemos 2.000 presos capturados y de ahí van para (las cárceles) Tocorón y Tocuyito, máximo castigo, justicia». Maduro añadió, frente a simpatizantes que marcharon en la capital, que «esta vez no va a haber perdón, esta vez lo que va a haber es Tocorón».

El presidente acusó a los manifestantes detenidos de presuntamente quemar centros electorales, así como sedes regionales del CNE. Maduro dijo que lo que hicieron fue «muy grave», por lo que habrá «justicia completa». «Todos confiesan, todos, porque ha habido un proceso estricto legal, dirigido por la Fiscalía General de la República, con plenas garantías y todos están convictos y confesos», añadió.

La coordinadora jurídica de la ONG Foro Penal, Stefania Migliorini, ha dicho a Efe que a algunos capturados los están presentando «en tribunales de terrorismo» y sin el acceso a una defensa con abogados privados. Foro Penal computa desde el lunes hasta las 15:00 horas de este sábado 939 detenidos relacionados con las protestas.

Los venezolanos en el exilio se sumaron también a la lucha de sus compatriotas con marchas que tuvieron lugar en todo el continente americano y también en España. En Estados Unidos, donde hay unos 750.000 venezolanos, de los cuales el 60% está en el sur de Florida, las convocatorias de apoyo a la oposición se multiplicaron en varias ciudades, incluyendo a Nueva York.

Los gritos de «Venezuela libre» también resonaron en la capital de Argentina, Buenos Aires, país en donde viven entre 220.000 y 250.000 venezolanos, en Panamá, República Dominicana, Honduras, Ecuador, México, El Salvador, Perú, Costa Rica, Paraguay y Colombia, donde tuvieron lugar algunas de las concentraciones más numerosas, en Bogotá, Medellín y Cúcuta, ciudad fronteriza con Venezuela.

También España, donde viven unos 400.000 venezolanos, se unió al clamor con una concentración convocada por la oposición venezolana en Madrid, que fue secundada por protestas de menos entidad en otras ciudades como Santa Cruz de Tenerife o Valladolid.

Sánchez y otros seis líderes europeos solicitan la publicación de las actas
A nivel político, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha suscrito una declaración junto a otros líderes europeos en la que expresan su preocupación por la situación en Venezuela y piden la publicación de las actas de las elecciones y condenan cualquier amenaza contra cualquier político venezolano.

La declaración ha sido firmada por Sánchez, el presidente francés, Emmanuel Macron; el canciller alemán, Olaf Scholz; y los primeros ministros de Italia, Giorgia Meloni; Portugal, Luis Montenegro; Polonia, Donald Tusk; y Países Bajos. Dick Schoof.

En el texto, al que ha tenido acceso la agencia Efe, todos ellos expresan su «gran preocupación» por la situación en Venezuela y piden a las autoridades que hagan públicas cuanto antes todas las actas con el fin de garantizar la total transparencia e integridad del proceso electoral. Al respecto, recuerdan que la oposición indica que ha recogido y publicado más del 80% de las actas que se han producido en cada mesa de votación y hacen hincapié en que esta verificación es esencial para reconocer la voluntad del pueblo venezolano.

«Continuaremos siguiendo de cerca la situación junto a nuestros socios y apoyando la democracia y la paz del pueblo venezolano», añaden los jefes de Estado o de Gobierno firmantes del texto.