Washington.- La actual vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, ha logrado superar el umbral de los 1.976 delegados necesarios para convertirse en la candidata demócrata a las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.
Harris ha reconocido sentirse «honrada» y ha avanzado que aceptará oficialmente la nominación la próxima semana, cuando termine la votación de todos los compromisarios.
«Esta campaña trata sobre personas que se unen, impulsadas por el amor a la patria, para luchar por lo mejor de lo que somos», ha añadido en su mensaje en la red social X.
De este modo, Harris se convierte en la primera mujer negra en encabezar la candidatura de un gran partido estadounidense, en palabras del presidente del Comité Nacional Demócrata (DNC), Jaime Harrison.
La nominación de la sucesora de Joe Biden se ha producido a través de una votación virtual y tendrá su paso final en la Convención del Partido Demócrata que se celebra en Chicago entre el 19 y el 22 de agosto.
PROCESO RELÁMPAGO TRAS RETIRADA DE BIDEN
Una vez Biden renunció a la reelección hace tan solo dos semanas y media por su desastroso papel en el debate con el republicano Donald Trump, el presidente dio su apoyo a Harris y en sucesivas reuniones virtuales los delegados que habían sido elegidos en el proceso de primarias y que habían comprometido su voto para el mandatario comenzaron a declarar su apoyo a la vicepresidenta.
El DNC dio hasta este martes para que se presentaran otras candidaturas, pero finalmente Harris fue la única aspirante demócrata y, por lo tanto, tenía garantizada su nominación, que será oficial el lunes y quedará escenificada en la Convención Nacional Demócrata de Chicago.
Kamala Harris debe ahora anunciar su candidato a vicepresidente, algo que podría conocerse la semana próxima.